22 ene 2013

Donde y que comer en Bariloche


Son casi un millón los turistas que año a año llegan a Bariloche con la intención de disfrutar de un reparador descanso en un entorno natural envidiable. Toda la ciudad está pensada para satisfacer la demanda de los visitantes, desde la infraestructura de alojamiento, pasando por la oferta comercial y gastronómica, además de todo el cronograma de tours y excursiones pensados para recorrer sus principales atractivos.

Los lugares de interés en toda la ciudad y la región vecina hacen que el cronograma de actividades sea completo y a elección de los visitantes para cada uno de los días que hayan destinado a su estadía. El punto más destacado del centro de la ciudad lo constituye su Centro Civico, en el que los turistas pueden apreciar el pintoresquismo de las construcciones en las que funcionan los organismos de gobierno locales, enmarcados por la belleza del Lago Nahuel Huapi.

Para quienes gustan de comprar artesanías y productos regionales, entre los que se destacan los chocolates, los dulces y mermeladas, así como también los tejidos, una buena opción es realizar un paseo de compras por los locales comerciales del centro de la ciudad. La mejor oferta se concentra sobre la avenida Ezequiel Bustillo – que bordea los márgenes del Nahuel Huapi- así como también sobre la Avenida de Los Pioneros, paralela a la anterior.

Además de los atractivos naturales y comerciales, la ciudad cuenta con una oferta gastronómica elogiada por todos los visitantes. Para quienes se preguntan donde y que comer en Bariloche, es bueno tener en cuenta que la mayoría de los restaurantes más reconocidos se ubican sobre las dos avenidas antes mencionadas.

Los platos que conforman la carta de cada restaurante es una tentación inevitable para los amantes de la buena gastronomía. Uno de los platos típicos imperdibles por ejemplo, es el curanto. Se trata de una preparación a base de mariscos, pescado y vegetales cocinada sobre piedras calientes que se colocan en la tierra. Cada uno de los ingredientes es separado por capas de hojas de nalca o pangue dentro de una olla de barro.

Otro de los manjares de la cocina típica de la región es el cordero patagónico, asado a la parrilla o en estacas. La carne que siempre es por demás sabrosa y tierna se sirve con diferentes salsas, entre las que se destaca el chimichurri, además de diferentes acompañamientos como pueden ser puré, ensaladas frescas o verduras salteadas.



Los pescados regionales también se destacan dentro del menú que ofrecen los restaurantes en Bariloche. La trucha es sin dudas el predilecto, rellena y acompañada de diversos ingredientes como hongos, quesos, almendras y vegetales como espinaca o cebolla.

A la hora de los postres, el listado de exquisiteces se completa con una variedad de chocolates de elaboración artesanal que son el elogio de los turistas, ya que se combinan con ingredientes como las almendras, el dulce de leche y los frutos rojos. Los dulces caseros de la región también merecen ser degustados, sobre todo los de frutos locales como sauco, grosella y rosa mosqueta.

María Luz Sallietti